A siete meses de los Juegos Deportivos Bolivarianos de 2009 en Sucre, los deportistas bolivianos que obtuvieron medallas de oro en la edición anterior de 2005 se preparan sin respaldo oficial. Entre ellos destacan los tiradores Gabriel y Carina García, quienes, junto a otros atletas, sumaron diez preseas doradas para Bolivia en los Juegos de Armenia y Pereira.
Tras su éxito en 2005, estos atletas recibieron premios monetarios del gobierno, pero no obtuvieron el apoyo continuo necesario para su desarrollo deportivo. Actualmente, enfrentan la falta de infraestructura y equipamiento adecuados, entrenando con recursos propios y sin becas ni auspicios oficiales.
La situación refleja una planificación deficiente por parte de las autoridades deportivas, especialmente considerando que Bolivia será anfitriona de los próximos Juegos. A diferencia de otros países participantes, donde se implementan políticas de apoyo sostenido a los deportistas, en Bolivia la preparación recae principalmente en el esfuerzo individual de los atletas.
Gabriel García, especialista en tiro deportivo, expresó su preocupación:
“Para los Juegos de 2005 trajeron al cubano Lázaro Román para que nos entrene. Ahora cada quien hace lo que puede”.
Esta falta de apoyo institucional pone en riesgo el desempeño de Bolivia en los próximos Juegos Bolivarianos, evidenciando la necesidad urgente de políticas deportivas más efectivas y comprometidas con el desarrollo de los atletas nacionales.
